El 15 de septiembre de 2012, el argentino Sergio “Maravilla“ Martínez derrotó por decisión unánime al mexicano Julio César Chávez Jr., una de las peleas más recordadas en el boxeo mexicano y de la que nunca hubo una revancha.
En una entrevista, el pugilista argentino expresó que tras esa pelea, realizada en Las Vegas, nada volvió a ser lo mismo para Chávez Jr.
Combatiendo conmigo se arruinó la vida en serio. Cayó en el alcohol y drogas“, comentó “Maravilla”.
“Maravilla” Martínez explicó que la segunda pelea no logró llevarse a cabo por malos entendidos, principalmente por parte de las promotoras.