El serbio Novak Djokovic aseguró este domingo sentirse “triste y vacío” después de quedar descalificado del Abierto de Estados Unidos tras golpear con una bola a una juez de línea durante el partido de octavos de final en el que se enfrentaba al español Pablo Carreño. El número uno del mundo afirmó lamentar “extremadamente” haber causado tanto estrés de manera “tan involuntaria”, y señaló que no iba a publicar el nombre de la afectada para respetar su privacidad.
Sobre su eliminación del Grand Slam neoyorquino, aseguró que va a trabajar para convertir su decepción en “una lección para mi crecimiento y mi evolución como jugador y como ser humano”. Tras el incidente, en el que la juez de línea fue golpeada en el cuello con la pelota y que durante unos momentos tuvo visibles problemas para respirar, la Asociación de Tenis de Estados Unidos (USTA, en inglés) anunció en un comunicado que le sancionaba con la pérdida de todos los puntos y el dinero en metálico que había conseguido en el US Open.