El mundo de las artes marciales mixtas fue sacudido por la noticia de la detención del excampeón mundial de peso completo, Caín Velázquez, en días pasados, esto por ser acusado de intento de homicidio al disparar a un hombre que viajaba en un vehículo en San José, California, pero los documentos oficiales del caso, arrojaron que lo que el peleador de origen mexicano quiso hacer, fue tomar la justicia con su propia mano.
La noche del miércoles se filtraron algunos documentos del juicio en los que, al hacer la indagatoria de los motivos por los que el también ex luchador de la WWE accionó su arma de fuego con contra de una persona, habría sido que uno de los ocupantes del automóvil era Harry Goularte, a quien identificó como el abusador sexual de un menor de su familia, se presume, uno de los hijos del expeleador de MMA, por lo que Caín disparó al automóvil de Goularte, pero los tiros impactaron al papá del presunto abusador.
Goularte ya enfrenta cargos de abuso sexual, incluso está cumpliendo con un arresto domiciliario y una restricción para no acercarse a menos de 100 yardas a personas menores de 14 años de edad, además de portar un brazalete para monitoreo. Se presume que Goularte se dirigía por el brazalete, cuando fue interceptado por el ex campeón de los pesos pesados, quien accionó su arma en contra del vehículo, pero hirió al padre del agresor, quien fue llevado al hospital donde reportaron que no tiene heridas que pongan en riesgo su vida.
El peleador hispano podría alcanzar la pena de cadena perpetua, ya que es un delito que tampoco tiene derecho a fianza, aunque algunas asociaciones latinas en California, buscan la manera de reducir la condena, puesto que alegan que se miden los crímenes, tanto de Goularte como de Velázquez, desde el punto de vista racial.